“¿Pero què es propiamente el aura? Una trama muy particular de espacio y tiempo: irrepetible aparición de una lejanía, por cerca que  ésta pueda estar. Seguir con toda calma en el horizonte, en un mediodía de verano, la línea de una cordillera o una rama que arroja su sombra sobre quien la contempla hasta que el instante o la hora participan de su aparición, eso es aspirar el aura de esas montañas, de esa rama.”

Benjamin, Walter, “Pequeña historia de la fotografía”, dins  Discursos interrumpidos I, Madrid, Editorial Taurus, 1987, pàg. 75